BLOGGER TEMPLATES AND TWITTER BACKGROUNDS

martes, 8 de noviembre de 2011

Loveless/Kouya x Yamato/Rating T.

16. Insecto.Tabla básica.30vicios.
Casi cinco muertes
(es lo último que tiene de ella. Un papel arrugado y húmedo entre sus dedos, contra la palma de su mano que suda frío. Manchado con sangre, con pólvora, con lágrimas, con el filo de su navaja y los hechizos del adversario que las ha derrotado, llevándolas de regreso. Aunque solo una de ellas aún respire. El cuerpo de Yamato es valioso para investigaciones. De todos modos, Kouya lo aferró como si sus brazos fueran tenazas)
Querida Kouya:
(Quemé la cena otra vez. Espero que no estés enojada. Hay ramen instantáneo y té caliente, por lo menos. ¿Cómo te fue en el trabajo? Me he sentido rara toda la mañana, como si algo fuese a pasar, ¿tú no? ¿Por eso has venido temprano?)
Sé que es hora de ir a dormir, pero no puedo hacerlo todavía, aunque tenga el cuerpo muy cansado.
(las dos perdieron el sentido de la alerta con los años, al convertirse en adultas. No lo esperaban pero Kouya se culpó. Después de todo, como Combatiente, era su responsabilidad proteger a Yamato)
El alma me bulle en el pecho y si mi voz no estuviera atrofiada por la pubertad, me pondría a cantar el Agnus dei.
(el embarazo de Yamato era de...menos meses que los meritorios según las supersticiones para anunciarlo entre los círculos de amistades falsas que generaron sus nombres igualmente...)
Más allá de tus objeciones. Me gustaría rememorar la época que pasamos (ese verano antes de comenzar el Instituto, el que nos dieron para conocernos a gusto) en aquella ciudad costera...
(Cuando llegan a destino, después de lo que parece una eternidad y nada, porque los ojos de Kouya están llenos de lunas sangrientas, reacciona solo porque tratan de separarla de Yamato, cuyo rostro se cubre solo por un pañuelo)
...hace no tanto tiempo, sin dolor en el corazón, porque en ese entonces no conocíamos el peligro, que no fuera el de nosotras mismas, el de vivir bajo las reglas de una maniática y en la posibilidad de una derrota lo suficientemente drástica como para costarnos la vida.
(Sangre, más sangre. ¿De qué sirve ganar ahora que no puede hacer esto diferencia alguna? Ella misma olvida los golpes que da y avanza hecha una furia, tras dejar a Yamato dubitativamente en el asiento del auto que las ha traído contra la voluntad de ambas, que tiempo atrás era una sola, desde entonces, cuando se fundieron en un mundo sin dolor, donde se pertenecían y complementaban, por encima de una simple y tonta marca sobre el busto)
Me gustaría volver a acostar mi cabeza entre tus piernas y mirar las estrellas, la luna que a penas se asoma desde la vista de nuestra habitación de costos moderados (Mamá-artificial-Nagisa-es-generosa-con-su-niña-adorada-Kouya-pero-no-se-te-ocurra-abusar-de-su-tarjeta-dorada)...
(-Pensé que a estas alturas, habrías aprendido del resultado de tus caprichos. ¡Ella te lavó la cabeza, Kouya! Debí haber hecho esto hace mucho tiemp...)
...aprender de tu boca entreabiertas las constelaciones e inventarles nombres junto con juramentos de eternidad...
(No hay muchas decisiones que tomar. Lo hubiera consumado por sí misma para ahorrar tantas molestias y dolor, sobre todo por la espera a Yamato. Una última vez, la navaja contra sus venas, sucia con Nagisa, embebida en Yamato, lágrimas y sangre, Kouya con las fuerzas que la abandonan, esperando terminar de rememorar esa vieja carta deshecha en sus manos durante todo el trayecto, que de preferencia en otro tiempo y en otro lugar más pacífico, sino en ninguna parte pero sin duda juntas, su otra mitad, a la que se dio el lujo de elegir antes que nada o a nadie, pronunciando cada magnífica palabra de nuevo)

0 comentarios: